Cuando la verdad es de mentira.

¿Qué pasaría si todo fuera mentira?
Si mi felicidad mintiera a la verdad sin piedad, si tu palabra no fuera de fiar, si se agotara mi de deso de amarrar en un futuro o de dejar de navegar por alta mar. Si hubiera más dudas de las que una  sabe manejar, si el arco iris estuviera en blanco y negro y si el tiempo alejara los recuerdos. Si las lágrimas de una sonrisa rompieran a gritar o si mis palabras dejaran de hablar y tus oidos de escuchar.
Lo llamas locura, lo llamo duda. Quieres normalidad, quiero  seguridad.

¿Cómo vivir lo soñado?

Hoy sustituyo la palabra soledad por la duda. La tristeza, por la inocencia; y la alegría, por el miedo.
Hoy mi mundo ha caído al suelo.
Y miles de lágrimas que tú no sientes,  a mí se me clavan.
Y miles de sonrisas.
-¿En serio?
-No.
Solo palabras escritas en un idioma desoconocido, que sólo el dolor sabe traducir.
La duda, por el miedo, el miedo, por la tristeza, la tristeza, por el deseo de irse, y el deseo de irse, por tu actitud.
Alejémonos del mar, vamos a bailar, que hoy el ritmo del viento, va a ser el de nuestros pasos, vamos a enseñar a las mariposas a volar.
Dejemos de pensar, y esperemos a ver que pasa, tan solo esperar a la libertad,pero eso sí,  no me impidas ser yo, no me conviertas en marioneta de tus deseos, ahora camino sola por un camino que no conozco, te busco, pero no te encuentro.

Buenos días mundo.

Te despiertas con el Sol.
Oyes cantar a la mentira, es una canción bonita, empiezas a bailar. Tu risa despreocupada te acompaña. Llamas a todo felicidad. Derrepente el silencio comienza a gritar. Tú no puedes ni hablar. El mar llora en silencio.
Orfeo niega con la cabeza y señala a la verdad, acurrucada en una esquina. La coges de la mano y gritas y lloras, y la soledad se convierte en tu única compañía. El Sol se aleja.
La luna te sonríe. Te acuestas por la noche, llorando por la pérdida y el derroche. Esconde todas tus palabras en el cajón de las mentiras, cérralo con llave, y la llave tírala al mar.

Dos cafés y un trocito de tristeza.

La razón se acerca, la soledad me besa. Veo el reflejo de tu sonrisa en mis lágrimas. El dolor araña mi alma, has conseguido lo que querías. La tristeza ha congelado mi sueño, me impide mover las alas. Ya no quiero ni soñar. El vacío separa nuestras almas con una muralla invisible y muy mojada. El cielo se ha roto y sus  cachitos se han caído al mar. No sé que pensar, ni para que lado andar. Ahora me resigno a suspirar y a intentar olvidar lo inolvidable Los recuerdos felices lloran en silencio a Orfeo. La niña corre por la playa con los pies húmedos.

El reflejo de tu mirada sobre la mía.

Quiero rasgar el tiempo, que el viento me lleve al medio de la nada y que la arena cubra al mar. Quiero que el dolor se canse y que amanezca en medio de ninguna parte. La lluvia llora a us palabras, mi corazón da la vuelta a la vida. el viento se llevó mi nombre y ya no sé quien soy. los búhos me guían, pero la oscuridad me impide ver más allá de tus pies. No necesito consuelo, ya no existen palabras de calma. E dolor le quitó el trono a la felicidad, y ahora me azotan las olas. El miedo me sonríe, tu presencia ha desaparecido, y en su lugar ha venido la razón. La indecisión me impide ver tu mirada, pero las sonrisas sin razón desbordan mi vida. Ya nada tiene sentido excepto el reflejo de tu mirada sobre la mía.

Suspiros a las estrellas.

El miedo grita a mi alma. Guardo nuestros recuerdos en el olvido, encierro tu sonrisa en lo prohibido.

La mala suerte toca la guitarra en la noche, y mi llanto la acompaña, los búhos escuchan. La impotencia guada silencio y se encierra en sus pensamientos. Necesito ayuda para encontrar mi inocencia perdida, pero solo se ofrece la razón. Los bosques me arañan, grito a tu presencia, el dolor canta en el sielencio.

Esto sobre pasa los límites del conceto que tenía como mal día.

                                                                                                                                                                                                                                                                                                          

El llanto de la lluvia, y la risa de las brujas.

Ahora el tiempo ha hecho efecto, así como la nieve ha cuajado.
Mis palabras hablan en un idioma desconocido para tus oidos. Las brujas han vencido, han cogido mi felicidad,  y mi sueño, y se han ido volando. Te he pedido ayuda, pero la risa de las brujas te impide oír mis palabras. Sueño con mi sueño, y deseo mi deseo, pero se alejan y  la razón se acerca.

Voy corriendo hacia tu presencia, pero tengo miedo de que sea demasiado tarde.

La lluvia atraviesa mis recuerdos.

Llevo una maleta vieja llena de lágrimas congeladas. La risa ríe en las calles de Madrid, y en mi corazón, el deseo de alcanzarla. El miedo ha conquistado mi alma, dando la mano al dolor. Mil suspiros  hacia el miedo, se pierden en una noche nevada. El miedo nubla mi felicidad, rasga mi sonrisa, me quita la calma, perturba mi calma.

Mi sonrisa de la mano con su presencia.

Salimos de la clase solo nocotras dos, cuando ninguna mirada era capaz de alcanzarnos. Bajamos las escaleras correteando y riendo sin razón. La felicidad bailaba a nuestro alrededor. Vimos las lágrimas de un anciano, y oimos la risa inocente de un niño. Salimos a la calle. El viento se divertía haciendo olas con nuestro pelo. La luna nos susurraba. Miradas indiscretas nos alcanzaron, guardamos en la mano un poco de agua de mar, que se escapó volando entre los dedos y la risa volvió a reinar. Vimos el horror del mundo, pero nos alejamos de todo con los ojos cerrados y dadas de la mano.

Un tic tac insoportable.

Cuatro suspiros en el aire, y un sueño muy lejano. Ya solo existen miradas y sonrisas, no quedan palabras. Y tan solo quiero parar el tiempo, pero nadie comprende mis sentimientos. El tiempo desgarró mi pasado, y colocó mi presente, espero que no me quite tu presencia, que no me quite mi presente. Tan solo un tic tac insoportable, en medio de una oscuridad silenciosa. Orfeo canta en la noche, y los lobos aullan a la luna, mientras, las manecillas del reloj no se detienen, y el tiempo me arranca el presente y me entrega un futuro borroso.



Si supieras lo que escondo en as miradas no dejarías que se movieran las agujas del reloj.

La sonrisa de la luna.

Los suspiros rasgan el silencio, y las olas del mar se han llevado mis lágrimas de la arena. Las sonrisas tiemblan, el pelo ondea, la calma arrancó a la tristeza de mi alma. El silencio se oye en la nada. Ahora mi barca navega por el campo, y ahora mis sueños se carcan volando. Su presencia me roba la razón,  rescata a mi  alma del olvido. Ahora los suspiros no tienen sentido, pero sí lo tienen las miradas. Ahora  se pueden ver las sonrisas, pero no tocar las lágrimas.
Desde donde ni los pájaros vuelan, desde aquí escribo.

Has apagado las estrellas.

La nada es mi hogar, que es la casa deL silencio. No existen sentimientos, solo dolores tremendos. No existen corazones, solo heridas en el pecho. Mi sueño es una barca vacía en medio del mar a la deriva.  Mis pasos no andan, mis palabras no hablan, el silencio me sonríe. El rastro de mis lágrimas refleja el brillo de las estrellas. El tiempo dio la mano a mi sonrisa, que se dejó llevar. Las estrellas han dejado de brillar, y ahora mis lágrimas reflejan tu mirada.

La melodía de mi llanto.

Veo el reflejo de mi vida en el agua, la trsiteza pellizca mi alma, el viento suspira al tiempo y mi alma grita. La calma ha desaparecido. El dolor está en tu palabras y en mis oídos. En mis manos está la nada, mi corazón está vacío. En mi aliento está escrito el dolor que he sentido. La trsiteza se respira en el ambiente, y de mi corazón se oyen los latidos. Escondo dos suspiros entre el rímel y me quedo un tercero entre los dedos de la mano. Me ahogo en el mar, me hundo en mis pensamientos, y sueño  mi sueño. Tu sombra me sonríe mientras tu presencia me olvida. Yo me subo a este tren, y ya vreré lo quepasa después.

Caricias de felicidad.

Gracias a http://noe-lifephotography.blogspot.com/ ahora tengo un poquito más de felicidad en mi corazón, y un premio más.
Las reglas son que tengo que contar siete cosas mas de mí, y dar el premio a quince personas más.

1.  Me encanta el chocolate con almendras.
2. Me encanta el cine.
3. Mis escritoras favoritas son Laura Gallego, Care Santos y Paula Santos.
4. Me gustan Los Protegidos.
5. Suelo soñar despierta.
6. Me gusta estar con mi mejor amiga( Paula ) hagamos lo que hagamos, con ella soy feliz.
7. Me gusta imaginar mundos en los que solo existimos Paula y yo.

Ahora van los quince blogs premiados:

1. http://simpleementeanttoo.blogspot.com/
2. http://ladelicadezadeunsuspiro.blogspot.com/
3. http://despertarde.blogspot.com/
4. http://gloneruda.blogspot.com/
5. http://alsonidodelostacones.blogspot.com/
6. http://eldiariodeojazos.blogspot.com/
7. http://byalookofyourswouldgiveaworld.blogspot.com/
8. http://xxx-memories-xxx.blogspot.com/
9. http://valewaldisperg.blogspot.com/
10. http://lafugadelaluna.blogspot.com/
11. http://reniturus.blogspot.com/
12. http://laaura3.blogspot.com/
13. http://lapuppa00.blogspot.com/
14. http://andro83.blogspot.com/
15. http://inthedimlight.blogspot.com/


Son quince blogs maravillosos, todos y cada uno de ellos, si sois alguno de los premiados, comentad.

Tres suspiros y un abrazo.

Tu risa es mi canción preferida, con la que me pongo a bailar. Mi llanto se ha escondido, y yo no lo pienso buscar. El dolor ha muerto, tal vez se ha hecho amigo del mar.

La felicidad canta, y la alegría baila. La luna brilla en la noche, el Sol alumbra el día. Las lágrimas se han ido, y tú has recogido los sueños que tiré al mar dentro de una botella de cristal. Mi alma volvió cuando te vi acercarte por el camino. Tus abrazos me sonríen, y la razón me abandona. Las rosas no tienen pinchos, los árboles tienen hojas. La felicidad me lanza un beso con la mano, mientras tu presencia me ayuda a esquivar a la madurez.

Quiero amar al Sol.

Oigo la risa de la luna a lo lejos. Veo a una chica, en vez de una niña, frente al espejo. Mi alma desea ir volando al País de Nunca Jamás con Peter Pan de la mano  y oír cuentos de princesas. Que canten los que bailen, y que bailen los que canten, que rían los que lloren, y que lloren los que rían. Quiero cruzar el mar de un salto, tocar un piano invisible. Quiero que la nada me acompañe y que tu presencia me sonría. Que las lágrimas de la mañana se guarden en un frasco de cristal por la tarde, del que me esté riendo horas y horas, desde el punto más alto de la montaña más alta. Quiero que me prestes tus alas, que mires encima de tu cabeza y que la consciencia se despida. Oigo tus pasos alejándote, pero ya no vuelo encima de tu cabeza.

Grito a tu presencia que la quiero.

Cuando mis pasos no son firmes, cuando las sonrisas se peguntan por qué sonríen, cuando el silencio sale de tus labios, cuando la imposibilidad abraza a un sueño, cuando los besos se ahogan en lágrimas, cuando las lágrimas salpican mi cara, cuando mi cara es la casa de la tristeza, cuando la tristeza se aferra a mi alma, cuando mi alma no deja huella donde pisa, cuando el olvido  intenta calmarme, cuando la calma me canta una nana, cuando los gritos disimulan a las nanas, cuando no quepo en mi cuna,  cuando las cien dudas me rodean, cuando no hay luna que me alumbre en la oscuridad, cuando me doy cuenta de que la comida de ayer estaba salada, cuando las olas me mojan los pies, cuando añoro tu presencia.

La ilusión me dio un beso en la mejilla.

Gracias a http://eldiariodeojazos.blogspot.com/ he recibido mi primer premio, y el que me ha hecho mucha ilusión.
Las reglas dicen que tengo que dar el premio a diez personas, y he seleccionado estas:
1. http://lafugadelaluna.blogspot.com/
2.http://elisa-prettythings.blogspot.com/
3. http://thesmileofcinderella.blogspot.com/
4. http://1001sonrisasxa1000lagrimas.blogspot.com/
5. http://eldiariodeojazos.blogspot.com/

También tengo que contar siete cosas más de mí, y voy a contaros estas:

1. Toco el clarinete.
2. Hago gimnasia rítmica.
3. Leo todas las noches antes de acostarme.
4. Tengo la mejor amiga del mundo.(Paula)
5. Me gusta sacar la lengua a mi reflejo en el espejo.
6. Me gusta hacerme crestas con espuma cuando estoy en la ducha.
7. Hace poco escribí un cuento, quien quiera que me lo pida, y se le mando.

A quienes os haya seleccionado debeis elegir otros cinco blogs  y dejarles este premio en el alféizar de la ventana, mientras sople el viento, y haga sol. Y contar siete cosas más suyas.

El viento me trajo tu aroma.

Tu presencia me dio la mano, y mi alma sonrió. Las risas infantiles abanican el ambiente, y una melodía alegre de clarinete se escucha a lo lejos. Voy correteando entre los árboles mientras recojo una margarita que coloco entra dos mechones  de mi pelo. No entiendo el significado de tristeza. El Sol brilla en medio de un cielo azul. Me pongo a dar vueltas sobre mí misma a la vez que silbo. Los abrazos me abrazan, las sonrisas me sonríen, los besos me besan, los sueños sueñan conmigo y las lágrimas desaparecen. Bailo alegremente con la felicidad al ritmo del clarinete. De repente, el alegre clarinetista se equivoca,

unos dedos entorpecen a los otros y la melodía se detiene. Una nube cubre al Sol, la felicidad me dice con una mirada preocupante que tiene que marcharse, y yo me quedo quieta, mientras el silencio me acaricia el pelo.

El dolor es mi rutina.

Si miro hacia delante veo dos caminos, pero la razón no se decide por ninguno de ellos. No quiero coger uno y dejar al otro atrás. Así que me quedo sentada, limpiando mis lágrimas, mirando los ojos brillantes de los búhos, y hundiendo  la cara en mis manos.  Ahora necesito que los dos caminos se unan en uno. No quiero tener que poner excusas a mis lágrimas. Quiero que el mar se calme y que tú le murmures a la lluvia que es hora de marcharse.  Necesito  un soplo de aire que me murmure al oído cual es lo bueno y cual es lo malo. Necesito tus brazos abrazando mis hombros, y unas palabras de calma saliendo de tus labios y entrando en mis oídos.  Necesito que la razón se aleje un rato, y que tu presencia esté conmigo.

Mi vida está rodeada por un foso lleno de agua.

Cando el boli, en vez de tinta, echa lágrimas. Cuando el dolor crece sin poder evitarlo, cuando los colores bonitos paracen innecesarios, cuando la marea está alta, cuando Orfeo se cruza de brazos, mi alma llora. Veo el horror, me hundo en el mar, y sueño. Todos mis actos carecen de sentdo para la razón, amanece tarde, y el Sol se pone pronto. La sal cubre mi pelo, y la luz está apagada, solo oigo mi llanto sin razón, en medio del silencio de la noche. Frases desordenadas inundan mis oidos, manos desconocidas agarran mis manos, corazones acelerados se hacen sitio en el mío. Pensamientos sin sentido azotan mi cabeza, y las lágrimas de cristal brotan.

Las brujas arañan mi alma.

El miedo me saluda con la mano y el temor me sonríe. Estoy acurrucada en un rincón con los ojos cerrados y las rodillas dobladas, suplicándo un ángel de la guarda. Apareces tú con una cara distraída y consigues arrancarme la preocupación del alma y ponerme una sonrisa.
Ahora asusto al miedo, atemorizo al temor, ahora las palabras tienen sentido, y los abrazos calor.
Tienes los pensamientos de Orfeo escritos en los labios. El viento me trae tu aroma cuando añoro tu presencia. Antes intentaba volar pero ahora me doy cuenta de que tú eres el vuelo. No quiero que el tiempo suavice los te quieros. Quiero cerrar los ojos y que me de el viento en la cara, pero que no pase el tiempo. Quiero que Orfeo te señale y que el calor de nuestro abrazo evapore todo el agua de los mares, que las flores sonrían, que los unicornios vuelen, y que los rós canten.

Orfeo está escondido.

Quiero hundirme en la dorada arena del desierto, donde la calma abanique mi alma, y donde el mar no llegue a alcanzarme. Pero ahora me adentro en el mar, en una barca guiada  por búhos, en la que la soledad me hace compañía, la sal cubre mi ropa y mis pestañas se humedecen.  Las cien dudas rompen  la espada, unas manos frías recogen los pedazos, pero no se cortan. Oigo el aullido del lobo, y el miedo le desea buenas noches a mi alma. Pero yo me escapo entre los árboles, y correteando por el camino correcto, he abierto los ojos para dejar de ver a Orfeo en sueños y verle en la realidad.

Tu poder es el agua y la sal.

Veo tu cara en el reflejo del agua de mar, giro la cabeza, y hundo la cara en la arena, las olas del mar vienen y van, pero tú viniste, y de mi cabeza no te vas. Revuelvo en el recuerdo y encuentro un buen tiempo, la contradicción de ahora. Nos sentábamos juntos, llamándonos amor, al pie del árbol del juramento, pero el árbol murió y ya sólo queda silencio. Ahora la tarde se convierte en lágrima, en el sonido de un clarinete dejando de sonar, y en una paz guerrera. Tú llenabas la nada, tú hacías que los colores bonitos brillaran, y que el abrazo fuera rey. Juntos poníamos nombre a todas las estrellas, y parecía que el tiempo no pasaba.  Pero el viento nos agarró, y el tiempo se puso en nuestra contra. Mi alma va pisando charcos, y con un paraguas en la mano. Las sonrisas lloran a la luna, pero la luna ya no me alumbra, las estrellas han dejado de brillar y la sonrisa se fue volando. Los colores bonitos se han convertido en unos que están más lejos que la simple gama de los colores.  La razón no entiende y las rosas se mueren.

Yo camino pero no avanzo.

Veo sonrisas y oigo risas, pero no las encuentro sentido. Oigo el sonido del agua, el chocar de de una cascada con la roca, pero no hay ira. La tristeza me abraza, y el miedo besa mi alma. El dolor crece como margaritas en el campo. La luna me saluda y el Sol ha desaparecido. Los lobos aullan tu nombre, y las rosas mueren. La lluvia me moja la cara. El césped se vuelve gris y el cielo negro. Tu rostro está grabado en el viento, y yo quiero que mi corazón deje de sentir. Me lanzas cuchillos con los ojos vendados.
Quiero imaginar un mundo en el que tú me sonrías, meterme por la puerta, darte un abrazo y decirte te quiero. Quiero gritar a los cuatro vientos, que la realidad no existe, que solo es un mal sueño. Quiero ser capaz de suspirar y olvidar. Quiero dejar de pensar que mis lágrimas van a inundar el mundo.

Quiero una brisa con sabor a melocotón.

Tu olvido me busca, tu corazón se cierra. Yo rujo en la tormenta, yo asusto al miedo, que arrodillado se queda, yo soplo al viento yo miro a tus ojos, yo suspiro a la esperanza, yo trenzo tu trenza.
El plateado reflejo de la luna en el charco guarda nuestro secreto, tu aliento es lo único que oigo, a parte del leve murmullo del viento, quiero ver al olvido alejarse, quiero recorrer un camino repleto de flores. Quiero recojer las hojas secas y tener un pájaro que las cante, para que a la vida vuelvan. Quiero ser desmigar mi vida, quiero ver mis sueños volando. Quiero que donde mis pies huella dejan, que las ortigas se calmen, y los claveles me canten. No quiero recojer la maldad que otros siembran, ni que mi huella quede impresa.
Quiero bailar el último vals con el olvido. No buscaré a un príncipe azul, buscaré a un sapo verde, , que me croe todas las noches una nana, para que yo sobre un nenúfar, sueñe.

En una esquina de mis pensamientos.

Ideas alborotadas sin ritmo, susurros en el alma, sombras de seres imaginarios, puertas de lugares inventados, ideas sin palabras, palabras sin sentido, palabras en vez de hechos, lágrimas que inundan sonrisas, sonrisas secuestradas, melodías inacavadas que anudan ideas, el sonido del silencio se apodera de las almas, impidiéndonos ser libres.
Llevando mis lágrimas al mar, dando suspiros al viento, entregando sonrisas al amor, dando el amor al olvido, trayendo el olvido conmigo, agarrando con fuerza tu mano, murmurando al viento mis pensamientos, el viento depositándolos en tus manos, regando plantas y entragando a la felicidad mi alma, aquí me quedo yo.

La alegría me ríe y la tristeza me llora.

El viento me sopla y la lluvia me moja. El pájaro me canta, y el príncipe me saca a bailar.
Mis torpes pies tropiezan una y otra vez, finalmente me caigo, y el príncipe ya no está para levantarme.
Me levanto sola, pero tropiezo con mi extravagante vestido, de modo que me queo ahí, sentada, quieta,  con un gesto indiferente en la cara y una sonrisa distraída en la boca, notando como el Sol me alumbra, las brujas me asustan, la poesía me gusta, la cuna me duerme, la rutina me aburre, el amor me agovia, las responsibilades se acercan sin que yo quiera, la inocencia se marcha sin despedir, las piezas del puzzle no encajan, as lágrimas caen, las sonrisas desaparecen, las preguntas sin respuesta me preguntan, mis ojos se abren y ven como estoy tumbada en mi cama de siempre, con mi pijama de siempre, y con la felicidad sentada enfrente de mí, sin acercarse ni alejarse. Me incorporo un poco, me siento, y veo como no hay vestidos extravagantes, ni amor, ni sonrisas, no hay nada.
Resumiendo, estoy donde siempre, hay lo mismo de siempre, y pienso lo mismo de siempre.

Mi corazón adelanta el ritmo del reloj.

Cuando parece que el tiempo se para cuando le  miras a los ojos y te ahogas dentro de esos lagos marrones.
Cuando cada palabra que se escapa de su boca sigue resonando en tu atolondrada cabeza cuando añoras su presencia.
Cuando aparece en tu mente su imagen con una sonrisa distraída y sonríes sin que la razón se entere.
Cuando la luna tiene el poder y el sonido del silencio es el único que se escucha, tus párpados deciden arropar a tus ojos, te vas volando al país de los sueños y sigue ahí, saludándote con la mano, divertdo.
Cuando en un instante cruzáis las mradas discretamente y tu corazón se adelanta sin consultarte al monótono ritmo del reloj.
Cuando esto ocurre, estás loco, quiero decir, enamorado, aunque en realidad es muy parecido.
Yo me despido, mientras me ahogo, en unos lagos de agua marrón, y te dejo mis pensamientos flotando en una vieja botella de ron.

Tal vez la felicidad haya venido a robarme al alma.

Tal vez haya llegado el momento en el que el pez chico se come al grande, en el que caperucita se come al lobo, y en el que yo saco la lengua al miedo. Tal vez ahora me toqué a mí eso de ser feliz.
La felicidad  no está en la estanterís de una tienda ni se puede pagar con tarjeta. No está dentro de un cofre del tesoro en el fondo del mar.
La felicidad llega cuando menos te lo esperas, entra sin llamar y se va sin despedir.
La felicidad está en cada sonrisa que aparece en tu cara inconscientemente, en cada detalle pequeño hecho con amor, y en cada abrazo que te rodea los hombros con cariño. La felicidad es caprichosa, y a veces invisible.